Metal

Te gustan las emociones fuertes y quieres disfrutar de ellas también en soledad. Por eso has llegado hasta esta página en la que te ofrecemos las últimas novedades en consoladores de metal para que sigas disfrutando de experiencias contundentemente eróticas.

Los consoladores metálicos son aptos para todo tipo de usuarios, hombres o mujeres. No obstante, por su dureza están especialmente recomendados para quienes ya tienen alguna experiencia en el uso de este tipo de juguetes insertables.

Los consoladores metálicos están pensados para proporcionar unas penetraciones más duras, intensas y de texturas muy pulida en las que además puedes jugar con los cambios de temperatura.

Los modelos de consoladores metálicos más habituales son:

• Tipo puño. Los más voluminosos y potentes. Pensados para la práctica del fisting y solo aptos para amantes con mucha experiencia. El consolador es tan grande como una mano o un puño de dimensiones reales.

• Consolador doble. Un juguete sexual insertable por ambos extremos. Es ideal para la estimulación simultánea durante los juegos en pareja, con penetraciones ano/vagina, vagina/vagina o vagina/ano.

• Consolador anal. Es un insertable específicamente diseñado para su inserción en el ano. También reciben el nombre de plugs anales cuando funcionan como una especie de tapón que se queda fijo en su posición una vez que lo introduces en el ano.

• Consolador Punto P o Punto G. Los consoladores fabricados en metal no son los más habituales para la estimulación del Punto P masculino o el Punto G femenino. Sin embargo, existen algunas excepciones. En estos casos te encontrarás con un consolador de eje ligeramente curvo y punta redondeada para un masaje íntimo de gran precisión.

Una de las particularidades más excitantes del uso de un consolador metálico es la posibilidad de modificar su temperatura para obtener mayores estímulos durante la masturbación. Puedes sumergir el consolador metálico en agua tibia o enfriarlo en la nevera o el congelador antes de insertarlo.

Es muy importante que, sea cual sea el uso que le vayas a dar al consolador metálico, este esté bien lubricado. Este tipo de consoladores proporciona una penetración muy dura e intensa. Aunque la superficie es extremadamente suave y deslizante, siempre es necesaria esta ayuda extra para su correcta inserción.

Los consoladores de metal son los más fáciles de limpiar. Este material es muy resistente y nunca da problemas. Solo te tienes que asegurar de no emplear ningún utensilio que pueda rayar la superficie (por ejemplo, un estropajo) y todo irá sobre ruedas.

Como los consoladores de metal son sumergibles y resistentes al agua, la forma más sencilla de limpiarlos es colocarlos directamente bajo un chorro de agua tibia y emplear un poco de jabón neutro.

Adicionalmente, puedes limpiar tus consoladores de metal empleando alguno de los productos limpiadores de juguetes que tenemos en Diversual. Son un modo de limpiar e higienizar el consolador de metal, ya que en su base de composición incluyen ingredientes para acabar con gérmenes y bacterias.

No utilices ningún producto de limpieza que no esté específicamente pensado para lavar juguetes sexuales. Podrían ser peligrosos al contacto con la piel, sobre todo en las zonas más íntimas de tu cuerpo.