Vibradores Realistas

Los vibradores con aspecto realista están pensados para aquellas personas que prefieren que sus juguetes sean lo más parecidos posibles a un pene de verdad. Existen diferentes tipos de vibradores reales que, además de ser réplicas perfectas de miembros masculinos, son el ejemplo de la innovación y la tecnología más puntera en el sector erótico.

Aunque imitar a la perfección una erección real es su principal objetivo, los vibradores realísticos pueden presentarse en diferentes modelos.

• Vibrador con controles integrados: los botones para regular el tipo de vibración y su intensidad están en la superficie del propio juguete, normalmente, en la parte inferior.

• Vibrador con mando a distancia: un pequeño dispositivo con cable o inalámbrico te permite tomar el control desde la distancia, o hacer que alguien más se encargue de ello. También entrarían aquí los vibradores por control con app.

• Vibradores con ventosa: son estupendos para disfrutar de la masturbación con mayor libertad. Una potente ventosa de succión ubicada en la base te permite adherir el juguete a una superficie lisa y masturbarte sin necesidad de sujetarlo.

Los usuarios suelen ser muy exigentes cuando se trata de la elección de un vibrador realista. Es un juguete sexual al que se le puede sacar mucho partido, sobre todo si tienes en cuenta todas sus particularidades antes de tomar una decisión:

• Material: la calidad de los materiales de fabricación es una parte esencial de la experiencia que proporciona un vibrador realista. Lo habitual es que cada fabricante disponga de un material particular para el diseño de este tipo de juguetes eróticos, y es la principal diferencia entre un modelo y otro. Ciberskin, ultraskin o realfeel son algunos de las propuestas de siliconas especiales que existen actualmente en el mercado. Es importante invertir en materiales de gran calidad para garantizar una experiencia verdaderamente realista.

• Detalles: no todos los vibradores realistas incluyen los mismos detalles. Los hay con glande, con venas recorriendo el eje, con testículos fijos o móviles en la base... Cuanto mayor número de detalles contenga, más realista será la experiencia. En este sentido, puede resultar interesante invertir en un modelo que lleve ventosa de succión en la base y te permita masturbarte sin manos en múltiples posiciones.

• Controles y alimentación: los controles de un vibrador realista pueden ser de dos tipos: botones integrados en la parte baja del juguete o control remoto (con o sin cable). También se distinguen dos tipos de alimentación: por pilas o mediante una batería recargable. Estos últimos resultan más prácticos y son los que acaparan un mayor protagonismo.

• Color: aunque los colores más habituales son los de la propia piel, el concepto de realismo en un vibrador no es algo demasiado rígido en lo que a tonalidades se refiere. Los más demandados suelen ser los vibradores realistas negros, blancos y marrones, por ser los que mejor imitan las características de una erección de verdad. Sin embargo, hay algunas marcas decididas a innovar en este aspecto, ofreciendo vibradores realistas en la forma pero con colores vistosos que se salen de lo convencional.

• Precio: el mercado de los vibradores realistas es muy extenso, por lo que existen modelos que se ajustan a todos los presupuestos. Por lo general, el precio de un vibrador realista parte de lo 50 euros, en el caso de los más económicos, pero puede llegar hasta cantidades mucho más altas en función del material de fabricación y de las prestaciones ofrecidas. Los modelos más caros suelen ser los de siliconas especiales patentadas por las marcas. Son los que consiguen un mayor nivel de realismo, tanto en formas como en texturas.

Un vibrador realista es un juguete sexual pensado para usuarios exigentes. Si buscas algo más que estimulación erótica y quieres alcanzar orgasmos idénticos a los que podrías experimentar al tener sexo con otra persona, te interesará conocer este tipo de estimulación.

Tanto si tienes experiencia en el uso de vibradores como si esta es tu primera vez, le sacarás mucho partido a un vibrador realista. El mercado actual ofrece infinidad de opciones adaptadas a los gustos de cada persona.

Hay vibradores realistas de gran volumen, con ventosa de succión en la base, con testículos, de diferentes colores... Es un juguete versátil y con gran capacidad de adaptación. Si quieres disfrutar del sexo en solitario sin pensar en tus juguetes eróticos como en un trozo de plástico, el vibrador realista es la solución.

El uso de un vibrador realista es tan natural como su aspecto. En cuanto te lances a probarlo te darás cuenta de que es algo instintivo para lo que parece que siempre habías estado preparada.

Si ya has usado con anterioridad dildos, vibradores convencionales o cualquier otro juguete de estimulación insertable, te darás cuenta de que el uso de un vibrador realista no es muy diferente.

Y si esta es tu primera experiencia con un juguete erótico de estas características, presta atención a estos consejos básicos:

• Busca un lugar en el que te sientas cómoda y en el que puedas relajarte sin que nadie te interrumpa. Es un momento solo para ti.

• Familiarízate con las características de tu vibrador realista. Sus dimensiones, su peso, su tamaño, sus texturas? Te ayudará a saber cuándo placer puedes obtener de él.

• Lubrica la superficie de tu juguete sexual con un lubricante íntimo que sea compatible con su material de fabricación. Los lubricantes de base acuosa son aptos para todo tipo de materiales.

• Lubrica también las zonas en las que vas a utilizar el accesorio, tanto si se trata de un uso solo superficial como si va a haber penetración (anal o vaginal).

• Experimenta con las funciones de tu vibrador realístico. Los controles están diseñados para que tengas acceso a ellos de un modo sencillo. Ve de menos a más y haz diferentes combinaciones de movimiento e intensidad hasta encontrar la que más te guste.

• Al finalizar el juego, lava tu juguete con agua tibia y jabón neutro. Recárgalo si es necesario y guárdalo en un lugar protegido, preferiblemente de forma individual.