Cómo hacerse (bien) una paja

¿QUÉ ES HACERSE UNA PAJA?

La palabra paja tiene muuuuchos significados, pero de todas las acepciones que reconoce la RAE, solo uno se refiere al acto de la masturbación.

La palabra paja viene del verbo latino pascere, que significa “calmar”, “satisfacer” o “dar gusto”. En la lengua árabe este verbo se transformó en la palabra pašša,que se pronuncia muy similar a paja en español.

Pero, además, existe una segunda teoría no lingüista que dice que el término paja se originó en la agricultura, más particularmente en la siembra de los cereales. Y es que la manera en que los granos se separan de la espiga durante la cosecha del cereal, recuerda la forma en la que se mueve la mano durante la masturbación de un pene. Dado a que esa espiga se conoce como paja, es muy posible que este sea el origen del término hacerse una paja.

Y si a estas alturas aún tienes dudas sobre lo que es hacerse una paja, te dejamos algunos otros sinónimos y eufemismos del onanismo en penes: zurrarse la sardina, hacerse un cinco contra uno, una manuela, una gayola, sacarle punta al lápiz, meneársela, cascársela, darle a la zambomba, asfixiar el ganso, jalarse el dong, pelársela... y así casi hasta el infinito (y más allá).

BENEFICIOS DE HACER UNA PAJA

Hacerte una paja forma parte de tu vida sexual e íntima, pero además puede aportarte un montón de beneficios más allá del placer:

• 1. Masturbarte te conectará con tu pene, pero también contigo mismx, con lo que te gusta y cómo te gusta.

• 2. Llegar al orgasmo será más fácil e intenso. Si te conoces bien sexualmente y aprendes a conectar con tu cuerpo y tus sensaciones, tus orgasmos pueden ser más intensos y placenteros.

• 3. Mejorará la erección, ya sea en solitario como cuando estés en pareja.

• 4. Con la práctica, la masturbación puede ser un buen entrenamiento para mejorar el aguante cuando disfrutes de relaciones con otras personas,

• 5. Te ayudará con la prevención de posibles infecciones gracias a la liberación de los fluidos.

• 6. Mejorará la calidad y la cantidad del esperma, mejorando así la fertilidad.

• 7. Ejercitarás tu zona pélvica, poniendo en forma los músculos que hay a su alrededor.

• 8. Liberarás el estrés y dormirás mejor, gracias a liberar endorfinas que te llevarán a un estado máximo de relajación.

Hacerte una paja te conectará con tu pene.

¿CUÁNTO ES MASTURBARSE DEMASIADO?

Si estás leyendo esto quizá es porque crees que te masturbas mucho, peeeero ¿cuánto es ese “mucho” en realidad? ¿Es una vez al día? ¿3 veces? ¿5...?

El “mucho” depende de cada persona, y esto en realidad va a depender también de sus creencias. Hay personas que creen que si eyaculan mucho están malgastando parte de su energía vital, porque también piensan que en el semen está su energía más valiosa, pero en realidad hay mucho mito detrás de este tipo de creencias.

Por eso, siempre que la masturbación no interfiera con tu día a día, con tus relaciones, con tu trabajo, con tu vida normal, un “mucho” puede ser tu normalidad y un poco para otra persona puede ser un mucho.

¿Crees que te masturbas demasiado?

¿CÓMO HACER UNA BUENA PAJA?

En realidad, puedes hacerte una paja como quieras, cuando quieras y donde tú quieras, si lo que te apetece en ese momento es disfrutar a solas. Pero, además, hacerse una paja no es un sustituto del sexo, sino un complemento que puede ser utilizado también en las relaciones de pareja.

Si no sabes por dónde empezar o quieres mejorar lo que estabas haciendo hasta ahora, estos son algunos pasos que pueden ayudarte a disfrutar de la paja (casi) perfecta para ti.

Descubre cómo es la paja perfecta para ti.

13 pasos para hacer la paja perfecta:

• 1. Para disfrutar al máximo de la paja, es importante dedicarle el tiempo que se merece, estar relajadx y disfrutar de lo que vas a hacer centradx en ese momento.

• 2. Encuentra un lugar tranquilo y crea el ambiente adecuado. Y si no te sientes cómodx puedes cambiar de escenario tanto como quieras: la cama, el wc, la ducha, el coche... las posibilidades son infinitas.

• 3. ¿En qué o en quién piensas mientras te haces una paja? Abre tu mente: fantasear te abrirá la puerta a otros mundos y a nuevas experiencias.

• 4. Añade lubricante para que la experiencia vaya como la seda: las sensaciones se intensificarán y el placer será aún mayor.

• 5. Coge la base del pene con una de tus manos y acaricia suavemente el glande con tu otra mano, bien lubricada. El glande es una de las zonas más sensibles de la anatomía, así que recréate todo lo que quieras en él. Masajéalo suavemente, haz círculos sobre su corona... sin olvidar la zona del frenillo.

• 6. Continúa masajeando con la otra mano todo el tronco del pene, subiendo hacia arriba desde abajo, variando la presión con tus dedos a diferentes alturas para volver a empezar una y otra y otra vez. El ritmo lo marcas tú.

• 7. Entrelaza tus dedos: continuar la paja a dos manos hará que cubras más superficie y puede ayudarte a añadir velocidad y control al asunto. Mueve tus manos de arriba abajo, entrelazando tus dedos para cubrir la cabeza y el cuerpo del pene. Si aprietas ligeramente ambas manos, la sensación será lo más parecida a la penetración.

  

  Practica el arte de la paja a dos manos.

• 8. Existe muuuucha vida más allá del típico sube y baja cuando te haces una paja, ¡prometido! Lo ideal es que explores diferentes técnicas de masturbación según el momento o lo que te vaya pidiendo el cuerpo.

• 9. Es hora de darle amor a los testículos, esos grandes olvidados. Un buen masaje testicular puede ayudarte a mejorar la erección y aumentar la producción de esperma y testosterona. Puedes comenzar acariciando suavemente los testículos y pasar tus dedos bien lubricados por cada uno de ellos, haciendo círculos mientras alternas la estimulación en uno y otro. Si vas a presionar esta parte tan noble de la anatomía, que sea con muuucho cuidado, los testículos son una zona delicada y hay que tratarlos con cariño.

• 10. Masajea levemente con una de tus manos la zona del perineo, sí, justo esa zona que va desde el pene hasta el ano. Presiona un poco, realiza círculos pequeños... Verás que la experiencia de la paja mejora si, mientras tanto, continúas acariciando con la mano que queda libre el tronco del pene, el frenillo, la base del glande...

• 11. Si quieres dar un paso más, puedes continuar hasta acariciar la entrada del ano y, si te apetece, introducir poco a poco uno de tus dedos para explorar el Punto P, ese Santo Grial de la excitación. Puedes experimentar todo lo que quieras, pero no olvides reaplicar lubricante sobre esta zona, ya que el ano no lubrica de manera natural.

• 12. Añade juguetes a la ecuación. Sí, todo mejora si añadimos juguetes y una paja no iba a ser menos. Una pequeña bala vibradora acompañando el movimiento de tus dedos o en el perineo mientras lo estimulas, un masturbador automático, un masajeador de próstata, un plug anal...

  

  Todo mejora si añadimos juguetes.

• 13. Recuerda que puedes (¡y debes!) prestar atención a otras zonas más allá de los genitales: los pezones, el cuello, la cara interna de los muslos... Hay un antes y un después cuando descubres tu propio mapa del placer.

Ahora que ya conoces la teoría, nuestra recomendación es que continúes investigando y explorando, que no dejes de probar... Nadie mejor que tú puede conocer lo que te gusta y cómo te gusta. Para hacer tu propia paja perfecta solo tienes que pasar a la práctica, variar movimientos, aumentar la intensidad... solo así darás con la verdadera clave de tu placer y disfrute.

Disfruta de tu propia paja perfecta.

• Todas las imágenes de este artículo han sido diseñadas y creadas por Diversual y no podrán usarse sin consentimiento previo.

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