Este artículo ha sido verificado y aprobado por la psicóloga y sexóloga Rosa Navarro el 08 de noviembre de 2020.
El sexo debería de ser placentero siempre, ya sea disfrutando de él en solitario o con otras personas, pero ¿qué pasa si al acabar la relación lo que te invade es un sentimiento de tristeza o unas ganas de reír incontrolables? ¿Te ha ocurrido alguna vez o has estado con alguien que, al acabar, ha reaccionado así? ¡Tranquilx! Este fenómeno tiene nombre y se conoce como disforia postcoital sexual (PCD por sus siglas en inglés: postcoital dysphoria).
¿Por qué te da un bajón después del sexo?
¿Te sientes triste después del sexo?
¿QUÉ ES LA DISFORIA POSTCOITAL?
Bien, ponte en situación: acabas de llegar al clímax, pero de pronto te da por reír o llorar sin saber por qué. Has tenido incluso que parar por un ataque de risa o porque sientes ganas de llorar sin estar triste realmente. ¿Te ha pasado? Si tu respuesta ha sido un “Sí”, todo eso que te ocurre se conoce como disforia postcoital.
Casi la mitad de las personas experimentarán disforia postcoital al menos una vez en la vida.
La disforia postcoital es una respuesta de tu propio cuerpo al relajarse y liberar hormonas como la oxitocina, la dopamina, la serotonina.... Puede ocurrir también antes de llegar al orgasmo, pero lo habitual es que ocurra después de alcanzar el clímax, cuando las emociones son muuuuy intensas.
Ten en cuenta que la disforia postcoital es algo completamente natural y no está asociada a lo mala que haya sido la experiencia. ¡Todo lo contrario! Se suele dar en casos de placer extremo en la relación sexual que acabas de disfrutar, pero tu pareja puede quedarse un poco desconcertada si no sabe de qué va el tema.
Si te pasa a menudo, coméntalo antes con tu compañerx de juegos para que no haya malentendidos. Compartirlo con esa persona y expresar cómo te sientes en ese momento hará que entienda mejor que no tiene que ver con la relación sexual ni con vuestra propia relación. Si es a tu pareja a quien le ocurre, añade una dosis extra de cariño y afecto para darle la vuelta a la situación y que se convierta en algo positivo.
Reír o llorar después del sexo es más común de lo que crees.
SÍNTOMAS DE LA DISFORIA POSTCOITAL
Seguro que esta situación te resulta familiar: estás en la cama (o en cualquier otro sitio) y, después de una relación sexual más o menos intensa, tú o tu pareja empezáis a llorar o a reír de manera descontrolada y sin explicación aparente. ¿Te ha pasado? Son los síntomas visibles de la disforia postcoital y puede durar desde unos minutos, hasta unas horas.
Dramas y comedias: la disforia postcoital en todo su esplendor.
Cada persona y cada orgasmo será distinto, pero si algo tenemos claro son las fases por las que pasarás: una primera fase de deseo que empieza en tu mente, seguida de la excitación, la fase de meseta, el orgasmo y vueeeeelta a empezar. Es durante esa vuelta a la calma cuando baja la intensidad y pueden aparecer estos síntomas de los que te hablamos: la tan desconocida disforia postcoital sexual.
Tu estado de ánimo previo y el coctel del resto de hormonas será el que determinará si eres más de risas o de llantos llegado el momento. Pero sea cual sea tu caso, ¡piensa que es algo positivo! La disforia postcoital es una respuesta sexual que indica satisfacción. Y aunque es muy habitual que suceda en relaciones con otra persona, también puede aparecer durante la masturbación.
Las fases del deseo.
POSIBLES CAUSAS DE LA DISFORIA POSTCOITAL
¿Por qué aparece la disforia postcoital? Existen numerosas teorías para explicar qué causa la disforia postcoital, pero la mayoría de ellas están ligadas a alternaciones neuroquímicas (más específicamente ligadas con la amígdala cerebral que se encarga de gestionar el miedo y la ansiedad).
La mayoría de las causas de la disforia tienen que ver con procesos hormonales y alteraciones neuroquímicas.
Esto, traducido a la explicación sencilla, vendría a significar que tu organismo, tras el orgasmo, libera distintas hormonas responsables del placer sexual que bloquean las reacciones negativas. Si esa liberación no se hace de manera eficiente o no se sabe gestionar, los neurotransmisores pueden dar la respuesta que ya conoces: reír o llorar sin mayor causa aparente ni explicación.
En otras ocasiones, se puede asociar la disforia con no ser capaz de controlar las emociones de manera correcta, teniendo más que ver con el estrés que se vive en ese momento, con alguna disfunción sexual o con experiencias pasadas que no han sido satisfactorias.
Conoce las causas de la disforia.
TRATAMIENTO DE LA DISFORIA POSTCOITAL
Si has llegado hasta aquí, ya sabrás que la disforia postcoital es algo totalmente natural y que seguramente acabarás experimentando (al menos) una vez en tu vida. Las recomendaciones que podemos darte es que, después de la relación, hagáis especial hincapié en las caricias, abrazos, besos… para evitar que sentimientos negativos puedan aflorar tanto en ti como en tu pareja.
Conocer la disforia postcoital te ayudará a actuar si aparece
Después del subidón brutal de hormonas como la dopamina, la serotonina, la oxitocina… llega la calma y es entonces cuando la disforia postcoital puede aparecer.
Si a pesar de saber esto, sientes que los sentimientos de tristeza te invaden de manera recurrente, nuestra recomendación es que acudas a un profesional para que compruebe que todo está bien.
¡Ahora ya lo sabes! Llorar y reír después del sexo son comportamientos completamente normales, incluso sin motivo aparente. Así que no te culpes ni culpes a tu pareja por ello, culpa en todo caso a las queridas hormonas.
¡Llorar o reír después del sexo es completamente normal!
BIBLIOGRAFÍA
- Schweitzer RD, O'Brien J, Burri A. Postcoital Dysphoria: Prevalence and Psychological Correlates. Sex Med. 2015 Oct 5;3(4):235-43. doi: 10.1002/sm2.74. PMID: 26797056; PMCID: PMC4721025.
- Burri A, Hilpert P. Postcoital Symptoms in a Convenience Sample of Men and Women. J Sex Med. 2020 Mar;17(3):556-559. doi: 10.1016/j.jsxm.2019.12.009. Epub 2020 Jan 11. PMID: 31937518.
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